miércoles, 5 de diciembre de 2012

Drenaje linfatico: Aplicaciones

El drenaje linfático manual terapéutico principalmente es de aplicación en el complejo campo de la oncología, para tratar el linfedema. También se aplica como tratamiento de elección para los casos de celulitis, edemas traumáticos o complicaciones linfáticas después de que alguien se haya sometido a la cirugía estética.
En nuestros días ya no es nada raro encontrar en los hospitales el departamento de linfoterapia, atendido por "linfoterapeutas".

Drenaje linfatico: Maniobras

En este tipo de masaje o drenaje linfatico, todas las maniobras manuales deben de ser muy suaves y en ninguna de ellas el paciente debe de sentir dolor alguno. Si alguna de estas premisas es incumplida, no se estará realizando un correcto tratamiento de drenaje linfatico.
La sesión de drenaje linfatico puede tener una duración variable, pero para ser una sesión, digamos correcta, nunca debe ser inferior a sesenta minutos ya que con menos tiempo, seguro que el trabajo no es todo lo completo que debería ser.
Para recibir un tratamiento de drenaje linfático manual terapéutico debe de haber previa prescripción médica y debe ser realizado sólo por un fisioterapeuta para garantizar que el tratamiento es correcto.
Por medio del drenaje linfatico se pretende un claro objetivo que no es otro que la activación de la circulación de la linfa, impidiendo que esta quede estancada y que consiguientemente se sature de substancias de desecho o de gérmenes nocivos para la persona.
Por último, apuntamos también que las manipulaciones que se realizan en el Drenaje Linfático Manual deben de ser específicas e irán dirigidas a favorecer el paso de la linfa hacia los ganglios regionales superficiales. Por tanto, este no es un masaje convencional, de ahí que hayamos recomendado mucho cuidado en el tratamiento y que lo imparta un profesional cualificado para ello.